Para conocer a Didot & Fournier, nos situaremos para comenzar este artículo en la Francia del siglo XVIII. Una Francia agitada, revolucionada, pre-revolucionaria. Las monarquías absolutistas, que dirigieron a la Europa de la Edad Media, van dejando paso a una nueva clase social: la burguesía. Este nuevo estrato, removiendo las bases del antiguo régimen, dotan de un nuevo aire y un nuevo pensamiento a los ciudadanos del viejo continente. Ahora la manera de hacer práctica, de mente comerciante, fundamentará los cimientos de un nuevo orden. Como es obvio, esto también se refleja en la tipografía, que es nuestro tema.
El advenimiento de las familias tipográficas del siglo XVIII
Las familias tipográficas que emergieron en el siglo XVIII marcaron un hito significativo al desvincularse del peso histórico de la caligrafía. Estas letras se erigieron como las primeras puramente tipográficas, mirándose a sí mismas y a su tiempo sin imitar el pasado. La tipografía moderna se caracterizó por su tendencia a la verticalidad, abandonando los sesgos propios de los manuscritos medievales. Además, se evidenció un nuevo contraste más acentuado entre trazos finos y gruesos, creando una estética más gráfica y consciente del equilibrio entre negro y blanco en la página.
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El legado racionalista de Didot y Fournier
En el escenario tipográfico de la pre-Revolución Francesa, dos nombres destacan: Fournier y Didot. Así como Diderot y Voltaire ordenaron el conocimiento moderno con su enciclopedia, estas familias tipográficas dotaron a la tipografía de un sistema racional.
Pierre Simon Fournier: pionero de la normalización tipográfica
A Pierre Simon se le atribuye la primera normalización del cuerpo del tipo a través de la creación de un sistema de medida: el sistema de puntos. Desde su fundición, Fournier generó abundante material tipográfico y ornamental, contribuyendo significativamente al desarrollo del arte tipográfico. Su legado se amplía con su «Manuel Typographic», una obra que se convirtió en un referente para generaciones futuras.
La formación artística de Fournier, proveniente de una tradición de generaciones de artistas, fue un factor crucial en su desarrollo. Comenzó a trabajar en una fundición a los 17 años, donde adquirió habilidades en laminado y grabado ornamental. Posteriormente, fundó su propia fundición, consolidándose como un destacado tipógrafo gracias a su producción de caracteres en cursiva.
François Ambroise Didot: perfección del sistema de medición
Años después, François Ambroise perfeccionó el sistema de medición por puntos, estableciendo que un punto era igual a 0,376 milímetros, un estándar que perdura en la actualidad. La saga de los Didot, sin embargo, no se limitó a la tipografía; se especializaron en la técnica de impresión, un componente esencial en la historia de la tipografía.
La grandeza de los Didot: Firmin Didot y la modulación vertical
La prolongación de la saga llevó a Firmin Didot a consolidar la robustez de la romana de trazos contrastados de su abuelo. Firmin introdujo una modulación aún más vertical, aportando su toque único a la familia tipográfica. Parte de la grandeza de las tipografías Didot se atribuye también a la calidad del papel de impresión producido por John Baskerville, una figura que merece una exploración más detallada en otro momento.
La curiosa coincidencia de Bodoni: un eco de los maestros comunes
Como curiosidad, es imposible no mencionar la relación con otra familia tipográfica, la Bodoni, que inevitablemente nos lleva a pensar en Didot. Aunque no se trata de plagios, ambos tipógrafos estudiaron a los mismos maestros, como Jenson, Caslon y Baskerville, lo que condujo a similitudes sorprendentes en sus tipografías. Didot, sin embargo, mostró una velocidad notable en la implementación de sus ideas.
La herencia digital: Monotype y Linotype
Para aquellos que deseen sumergirse en las familias tipográficas digitales de Fournier y Didot, las multinacionales Monotype y Linotype son los actuales custodios de estas legados respectivos. La digitalización de estas tipografías asegura que continúen siendo relevantes en el diseño contemporáneo, preservando la riqueza y la elegancia que definieron una era.
Conclusión: El legado imborrable de Didot y Fournier
En conclusión, la Francia del siglo XVIII vio el surgimiento de familias tipográficas que trascendieron su tiempo, dejando un impacto imborrable en la evolución de la tipografía. Desde la racionalización de Fournier hasta la perfección del sistema de puntos por parte de los Didot, estas figuras sentaron las bases para la tipografía moderna. Su legado perdura en la digitalización actual, recordándonos que la tipografía es más que letras en una página; es una narrativa visual que refleja la evolución de la sociedad y el pensamiento.
Un comentario
Hola,
Estoy realizando un trabajo de la universidad. Y buscando información sobre la família Didot, he llegado a esta pagina. Encuentro super interesante la información que poneis. Tengo dudas sobre la familia Didot, vosotros me podrias facilitar información más extensa sobre ella?
Muchas gracias, espero respuesta.
Laura